La época del Renacimiento legó al mundo grandes genios del arte y el pensamiento. Hombres brillantes, pensadores y eruditos que hicieron que aquellos años una de las etapas más brillantes de la historia. Las mujeres no quedaron atrás. De hecho, las que tuvieron la suerte de nacer en estratos privilegiados aprovecharon la oportunidad. Tuvieron que luchar contra los prejuicios contra su género, pero consiguieron crear a su alrededor cortes magníficas en las que se daba cita el arte y el pensamiento al más alto nivel. Cortes como la de Isabel de Castilla, Isabella d'Este o Isabella Gonzaga acogieron a pintores, poetas y humanistas. En Portugal, una princesa convirtió su palacio en un Parnaso. Se llamaba María de Avís y era hija de Manuel I de Portugal y su tercera esposa, Leonor de Austria. Nació el 8 de junio de 1521 y poco después su padre dejaba este mundo y la corona lusa a su hijo Juan III. Este se hizo cargo de su hermanastra mientras que la madre de esta dejó atrás la corte de Portugal sin poder llevarse con ella a María. Juan no se lo permitió, pues esta podía ser un importante peón en sus estrategias dinásticas. Lo que no esperaba es que María resultara tener más carácter de lo que se esperaba en una mujer. María rechazó uno tras otro a todos los candidatos que Juan le proponía, incluido su primo Felipe II.
La princesa creció rodeada de mujeres eruditas, entre ellas las ilustres hermanas Luisa y Ángela Sigea que le enseñaron latín y otras disciplinas humanísticas. Instalada en su propia casa a los 16 años y con la clara intención de vivir su propia vida y no casarse nunca, empezó a llenar su palacio de libros creando una biblioteca que se hizo célebre en el reino, conocida como "museolum". Mujeres como las Sigea, Joana Vaz, Paula Vicente, Publia Hortensia de Castro dedicaron su vida a la poesía, el arte, el estudio de las lenguas clásicas disfrutando de una libertad inusitada para tantas mujeres de su tiempo.
A su muerte, el 10 de octubre de 1577, María de Avis se había convertido en todo un referente de erudición femenina.
Si quieres leer sobre ella
Mujeres Silenciadas en el Renacimiento 1. La corte, la Iglesia y los límites de la ortodoxia.
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