Sabina Spielrein (Keira Knightley) llega al sanatorio suizo de Burghölzli para ser tratada de un cuadro psiquiátrico grave. Sabina es una joven de dieciocho años con un pasado tortuoso de agresiones físicas y psicológicas por parte de una padre agresivo. Desde bien pequeña ha sufrido trastornos mentales que ahora el psiquiatra Carl Gustav Jung (Michael Fassbender) pretende sanar con un método nuevo. Así arranca la brillante película Un método peligroso en la que se recrea la historia de una de las primeras psicoanalistas de la historia y, como a menudo pasa con las mujeres, muy poco conocida.
Sabina Spielrein (1885-1942) no solo consiguió superar su enfermedad sino que terminó convirtiéndose en ayudante de Jung en el sanatorio y se matriculó en la Universidad de Zurich donde se graduó en medicina con una tesis sobre la esquizofrenia. A lo largo de la cinta se recrea la angustia de Sabina, interpretada por una Keira Knightley que parece realmente atormentada con una actuación excelente.
La relación entre el doctor y la paciente traspasará los límites de lo estrictamente profesional y Sabina sufrirá profundamente por ello.
El tercer personaje importante de la película es Sigmund Freud interpretado por un irreconocible Vigo Mortensen que se mete en la piel del famoso psicoanalista de manera igualmente brillante.
Un método peligroso es una película muy interesante basada en la amplia correspondencia mantenida entre los tres y, aunque como en toda cinta histórica hay elemento ficticios, en general, es una magnífica ocasión para descubrir la personalidad de una mujer poco conocida para el público en general.
Fotos: Sensacine