Religiosas












Monjas, místicas, santas, beatas, mártires, visionarias, religiosas

Comentarios

  1. ¡Felicidades por tu trabajo!. Un gran aporte para las mujeres, y también para aquellos varones que admiran tanto a quienes han buscado hacer la diferencia.

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  2. Muy interesante, creo que falta una mujer muy importante Sor Juana Inés de la Cruz.
    Saludos

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  3. Eres una persona inteligente, además,se nota que investigas muy bien la vida de cada persona sobre la que escribes, gracias siempre me ha gustado la historia y contigo estoy aprendiendo más

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  4. Acabo de conocer esta página y me encanta. Que maravilla. Te sugiero también que incluyas en este apartado a la Beata Ana de San Bartolomé, secretaria personal de Santa Teresa y fundadora del Carmelo en Francia y Bélgica

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  5. Hola Sandra, me encanta todo de esta pagina, me gustaría que también puedas incluir a "Santa Rosa de Lima" y a María Micaela Villegas y Hurtado de Mendoza. Muchas gracias, me encanta tu pagina.

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  6. Falta el de Juana Urniza Fundadora de las Comendadoras del Espí A los diez años de su fundación ya contaba la Comunidad con treinta religiosas. Varios casos milagrosos se le atribuían durante su vida religiosa, como la curación de una monja, enferma desahuciada, mediante sus oraciones a Sta. Rita, de la que era muy devota. Tuvo una gran contrariedad en los últimos días de su vida. En marzo de 1900 fue nombrado Obispo de Pamplona, el agustino Fray José López de Mendoza, el cual, queriendo suavizar la regla, suprimió a la Comunidad las dos horas de oración de media noche, y no permitió que Sor Juana fuese Priora, por ser partidaria de las dos horas de oración a media noche. Esta decisión del Sr. Obispo le afectó tanto a Sor Juana. que, a pesar de llevarla con santa resignación, enfermó gravemente, y, después de recibir con gran fervor los santos sacramentos, fue a disfrutar de los goces eternos del cielo. Las monjas lloraron su muerte, como se llora a una madre. Murió a la edad de sesenta y seis años, después de haber pasado en religión cuarenta y ocho, habiendo ejercido el cargo de Prelada en los dos conventos veinticuatro años. En enero de 1941, en presencia del Sr. Visitador de religiosas y del Sr. Párroco de Santa María de Sangüesa, se abrió el nicho, donde reposan los restos mortales de la que había muerto en olor de santidad, y se encontró el cuerpo completamente entero dando la sensación de que el cadáver no había sufrido alteración alguna ritu Santo

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