Los grandes artistas son altavoces. Ellos reverberan sus mensajes que se replican exponencialmente, sobre todo en esta era de viralizaciones, clicks y reproducciones masivas. Rosalía es uno de esos nombres propios que se convierte en mensajera a la vez que deleita con su voz y con su capacidad de crear. Lux es su nuevo trabajo y para encontrar inspiración ha escudriñado en nombres femeninos del pasado. Y no en nombres cualquiera. En nombres santos, místicos, de mujeres que dedicaron su vida a la contemplación y a la divinidad. Una mezcla extraña en este mundo aséptico y alejado de cualquier atisbo de espiritualidad. ¿Ha pervertido Rosalía esos nombres? Eso no es tarea mía juzgar. Lo que sí ha hecho ha sido poner nombres pasados en primera línea. Ha traído a personalidades medievales, renacentistas, antiguas, y las ha elevado a la categoría de pop star, si se me permite el concepto ochentero. Veamos quienes son estas musas de Rosalía. Hildegarda de Bingen Esa gran dama ...
El 5 de noviembre de 1917 nacía la aviadora francesa Jacqueline Auriol. Hija de un rico constructor naval, Jacqueline estudió en París y en 1938 se casó con Paul Auriol. Durante la Segunda Guerra Mundial colaboró con la resistencia. https://www.vendee.fr/actualite/qui-etait-jacqueline-auriol-dont-le-college-de-challans-porte-le-nom En 1948 obtuvo su diploma de piloto tras aprender a volar en un biplano. Apasionada de los aviones, se convirtió en piloto de pruebas y años después consiguió el título de piloto de helicóptero. En 1953 se convertía en la primera aviadora europea en romper la barrera del sonido. Durante años pulverizó infinidad de récords y recibió muchas condecoraciones. En 1983 entraba a formar parte de la Academia francesa del aire y el espacio. Falleció en año 2000.